Creado por Inma Love
Fecha 02/06/2023
Tiempo de lectura: 6 minutos
El cabello es un órgano vivo, el ciclo de crecimiento es similar al de las plantas. Su raíz nace bajo el cuero cabelludo dentro de unos espacios llamados folículos pilosos. En una planta representarían a la raíz que nace en el bulbo y crece hasta que sale por la tierra.
Los folículos pilosos son los más importantes para el crecimiento por lo que no les puede faltar limpieza, hidratación y nutrición. Sea vía externa a través de los productos y/o a nivel interno a través de la alimentación por el torrente sanguíneo en forma de minerales, vitaminas y proteínas. Es muy importante alimentarnos bien.
La fitoterapia, o productos naturales, como las plantas, especies… pueden ayudar a hacer que el crecimiento del cabello sea óptimo, prevenga la caída de forma más lenta gracias a las plantas depurativas del cuerpo y a las que favorecen la circulación sanguínea. Pero si notas caída desde hace tiempo o se te está pronunciando en un corto tiempo, ves al médico y que te revise, aconseje y te haga un seguimiento. Incluso que te mande a un especialista o a un sitio donde te hagan injertos con total garantía y seguridad.
Cuando se secan los conductos que nutren a los folículos a través de la sangre, es necesario hacerlas estimular mediante ingredientes o formas que lo dilaten, como el masaje, para que despeje estos conductos y entren los ingredientes/nutrientes necesarios.
Hay personas que padecen de cabello sin brillo, fino, que se rompe fácil, erizado, encrespado, de fácil caída o con caspa. Normalmente usamos un producto que compramos para darle solución al/los problema/s, pero, debemos saber, que hay plantas que nos pueden ayudar a contrarrestar éstos de forma más natural, como: el romero, tomillo, salvia, nogal, nopal o manzanilla/margarita, son los que nos aportan fuerza, brillo y resistencia al cabello, entre otras cuantas propiedades más.
El tratamiento más usado, vendido y recomendado es el Minoxidil.
La medicina natural y el uso y consumo de las plantas medicinales deben ser siempre hechas con el consejo y supervisión de un profesional, debes tener cuidado con la aplicación y las cantidades, deben decírtelas. Si no pueden tener efectos contrarios o tóxicos para lo que nos las ponemos/tomamos. Tampoco todas son buenas/aptas para todas las personas.
Las plantas que ayudan a favorecer esa nutrición, salud, fortalecimiento, combatir el estrés a través del riego sanguíneo son:
- Onagra: compuesto de ácidos orgánicos, vitaminas, aminoácidos y minerales, ideales para los problemas de alopecia que estén en conexión con problemas circulatorios.
- Gingko: según la cantidad ingerida, puede aumentar el riego en el folículo piloso.
- Diente de león: evita que se retengan los líquidos, tiene propiedades depurativas, éstas eliminan las toxinas y protegen al hígado de posibles intoxicaciones.
- Cola de caballo: tiene un alto contenido en sílice, esto hace mantener el cabello en estado óptimo. Previene la retención de líquidos y es muy importante en la hidratación de los folículos pilosos.
- Laurel: combate la caspa y el exceso de sebo. Se tiene que aplicar directamente sobre el cabello el líquido después de cocerlo y dejarlo secar.
- Ortiga: regenera el cuero cabelludo, ayuda a prevenir la caspa y el sebo. Sus aplicaciones deben ser a través de fricciones mañana y noche.
- Boj: antiséptico natural, deja el pelo libre de tóxicos. Se aplica en la piel.
- Tisana: la mejor para calmar la ansiedad y los nervios, por su capacidad de relajar y no padecer espasmos.
- Lavanda: puede tomarse como infusión o aplicarla en la piel sobre el cabello. Tranquiliza, ayuda a relajar los folículos pilosos y aumentan el riego sanguíneo en la zona donde se aplica.
- Ylang Ylang: con propiedades sedantes, ayudan a combatir el estrés. Rica en aceites esenciales, nutren y previenen la alopecia.
- Romero: una planta excelente para ayudar a mejorar la circulación capilar y aportarle brillo al pelo, previene la caída. Una manera antigua de usarlo para los mejores resultados, es macerar dos ramas frescas de romero con vinagre de manzana, en un bote de cristal cerrado y en una zona oscura, durante dos semanas. Luego, usaremos ese líquido resultante antes del aclarado final del cabello. Observaremos que el olor se va rápidamente y el resultado es un pelo mucho más brillante y con más suavidad. Previene y elimina piojos, liendres y ninfas. Para la caída, lo aplicaremos en el cuero cabelludo dando círculos con las yemas de los dedos, sin rascar, ni frotar.
- Nogal: sus hojas aportan brillo y fuerza. Se recomienda en cabellos de color castaño medio o de medio a oscuro. En los cabellos de color más claro lo oscurecerá, ya que tiene también la función de tinte natural. Previamente se hervirán las hojas en agua en un cazo y cuando llegue a una temperatura templada, aplicaremos el líquido resultante en el cabello. Lo dejaremos actuar 15 minutos. Antiguamente se hervía con cerveza, en vez de agua, y aportaba mucho brillo también, pero ya no se suele hacer. Nota: al hervir la mezcla, el alcohol se evaporaba.
- Salvia: da fuerza y brillo al pelo. Previene caspa y disimula la aparición de las primeras canas. Se hará una infusión de salvia, hirviendo durante dos horas, y al enfriar, se le añadirá una cucharada grande de vinagre de manzana, después nos lo dejaremos actuar durante 30 minutos y aclararemos.
- Tomillo: es antiséptico y antibacteriano: ayuda a prevenir la caspa, los picores, la descamación, las rojeces, potencia el crecimiento del cabello, porque estimula la circulación capilar. Se usa aplicando la infusión hecha con él y dando un masaje con vitalidad en el cuero cabelludo.
- Manzanilla: aclara el tono claro del cabello. En algunos productos cosméticos capilares lo incluyen para potenciar el rubio y el brillo. Combate la sequedad capilar, según qué casos provoca la descamación.
Comentarios recientes