Creado por Inma Love.

Fecha 22/05/2023

Tiempo de lectura: 6 minutos

Siempre deberás elegir la gama de productos que se adapten a las necesidades de tu cabello según vaya pidiendo o cambiando.

Puedes usar distintas marcas, con distintos ingredientes, cada uno hará su función.

Debes conocer la alcalinidad o acidez en la que se encuentra tu cabello, como he explicado anteriormente y así elegirás mejor.

Debes lavar el cabello, al igual que tu cuerpo, porque se ensucia, sea por las partículas del medio ambiente, suciedad, sudor, polvo, contaminación, radicales libres, productos de fijación, el agua dura, como en ciertas ciudades. El tallo absorbe las sustancias suspendidas y ensucian la cutícula. Aparte evitas problemas e infecciones en la piel del cuero cabelludo y el cabello.

El proceso es lavar cada dos días, dos enjabonadas, sin frotar, aplicar champú en las manos la cantidad de poco más de una cucharada sopera y frotar con la otra palma de la mano, pasar a la parte de arriba de la frente, la coronilla, los lados y detrás en la nuca, repartir en círculos en el cuero cabelludo hasta que todo él tenga producto y pasarlo a los mechones en su misma dirección, hacía abajo, a menos que lo tengas muy corto. Aclarar con agua tibia. Repetir igual la operación y aplicar el acondicionador, la misma cantidad o más si tienes mayor sequedad, largaría o es rizo tu cabello con el cabello muy húmedo, no lo escurras, repártelo en la misma dirección y mientras aplícate el gel o un exfoliante en el cuerpo y/o la cara. Dale un par de minutos o 5 si es una mascarilla, después aclara hasta notar que el cabello está mojado, nada resbaladizo, ni extra suave, porque quiere decir que aún quedará producto, por lo que tendrás que seguir aclarando, para que no queden restos a la hora de secar o cuando tengas seco ya el cabello. Notarás, que quedará opaco o no lo limpio que corresponde. Al secar, hazlo con una toalla de microfibra a toques en la dirección del cabello, no frotes, ni la dejes puesta, le quitarás la humedad que le has aportado y que necesita para estar suave y brillante. Sólo se dejará cuando tengas una mascarilla o tratamiento puesto en él, así provocarás calor y mejorarás el estado del cabello ya que penetrarán los ingredientes en su interior con mayor facilidad. Sino, sólo seca a toques y la toalla al sitio. 

Si lo lavas a diario haz todo igual, pero sólo una enjabonada.

Si lo secas, deberás usar protector térmico siempre en cada mechón de tu melena para que el calor no provoque daños en él, como la opacidad, sequedad, enredos, no elasticidad, que no se mantenga el color el tiempo que toca, ni el peinado…

Ves al salón a que te hagan el corte de lo preciso cada dos meses. Y para el color también acude al mismo.

Tienes dos tipos de productos:

  • Ionizables: están las soluciones antiseborréicas, nutrientes y oxigenantes
  • No ionizables: líneas completas de champús, acondicionadores, cremas, geles, fijaciones, tónicos, y los de tratamiento

Los tensioactivos pueden tener carga eléctrica o no. Son necesarios para crear champús (y detergentes). Su función es limpiar. Pueden ser muy energéticos, tanto que pueden hacer que tu cabello se seque más de la cuenta y provoque enredos. Si lo vemos a través de un microscopio, observaremos que las escamas están completamente abiertas, lo que provocan que se enreden entre ellas de forma muy fácil. Lo notarás en una simple aplicación.

Las sales son ionizables. Suelen usarse los laurilsulfatos de magnesio, ya que irrita la piel.

LOS PRODUCTOS CAPILARES

Son los productos que se usan en el cabello y el cuero cabelludo para obtener limpieza y diversos beneficios y control de algunos de los problemas que podamos padecer en él.

Se clasifican en:

  • Preventivos: controlan un problema suave o ligero que podamos tener en cuero cabelludo o cabello. Están el exceso de grasa, caída prematura… hay champús, acondicionadores, ampollas, lociones, pastillas…
  • Correctivos: reequilibran un problema mayor que el anterior, son líneas de limpieza, tratamientos y acondicionadores para corregir el problema que podamos tener en el cabello. Puede ser para que la cutícula se cierre, o cuando está más seco de lo normal o de lo que debería, ha sido tratado químicamente o muchas veces con secador y/o plancha. Estos tratamientos deben tener como ingrediente principal ácidos grasos.
  • De estilo: para dar o mantener una forma que queramos ese día en nuestro cabello, sea para controlar o cambiar el estilo porque nos apetece. O bajar esos pelillos nuevos que están saliendo. También puede incluirse aquí el serum, que es para curar los medios y puntas. Pon de 2 a 4 o 6 gotas, depende de la largaría, sequedad, grosor o rizo del cabello y repártelo de medios a puntas en plano con la mano, en la misma dirección del cabello, después peina, por si nos ha quedado algún mechón sin aplicarle.
  • De mantenimiento: cuidan y mantienen el cabello en perfectas condiciones. Son líneas de limpieza, acondicionadores y tratamiento.

Los productos que se venden en tiendan especializadas, en su etiqueta, suele poner el pH que tiene el producto.

Tipos de cabello y recomendaciones:

  • cabellos grasos: productos que contengan ingredientes como el azufre, esencia de cedro y extracto de toronja.
  • cabellos secos: productos que contengan ingredientes como lecitina, lanolina, extracto de placenta, ácido hialurónico, pantenol, octil methoyzinnumate, sodium PCA, extracto de jojoba y extracto de hierbabuena.
  • cabellos sensibilizados: productos que tengan ingredientes como lanolina/aceite de flores, médula, cetrimonium bromide, actil methoyzinnumate, extracto de althea, sodio PCA, aceite de eucalipto, ácido hialurónico, cistina, hoja de parra, vitamina E y aceite de almendras.
  • cabellos quebradizos: productos que contengan ingredientes como aceite de visón, cistina, vitamina A, aceite de olivo y extracto de semilla de uva.
  • cabellos finos y/o blandos se recomiendan productos que contengan los ingredientes como química, cyclomethizone, serbital, cistina, vitamina A y extracto de Ammamelis.

Para cueros cabelludos con problemas de:

  • Seborrea/grasa: deben usar productos con ingredientes como ácido acético, ácido bórico, extracto de Ammamelis y vitamina F.
  • No asepsia/no limpieza suficiente o básica: deben usar productos con ingredientes como la quinina y el ácido bórico.
  • Teñidos: deben usar productos con ingredientes como líquido amniótico, colágeno, extractos vegetales, vitaminas, proteínas, pantenol, ortiga, manzanilla, germen de trigo, octhil methoxycinnamate, ácido hialurónico, triosulfato de sodio, EDTA, tetrasodio, cemonila, pantenol, girasol, canela, sodio PCA, aceite de albaricoque y aceite de durazno.
  • Decolorados: deben usar productos que contengan ingredientes como: colágeno, proteínas, pantenol, manzanilla, algas marinas, ácido hialurónico, vitamina E y aceite de durazno.
  • Con inflamación o con facilidad de reacción a ciertos productos o estados o estaciones, incluso medicación: deben usar productos que contengan ingredientes como el azuleno.
  • Pérdida/caída de cabello/alopecia: deben usar productos con ingredientes como la arginina, antioxidantes, vitamina B6, progesterona, ácido bórico, minerales y vitamina H o biotina. El cabello volverá a nacer, a menos que sea un problema hereditario o congénito. No te preocupes si estos son tus casos.

ELECCIÓN DE PRODUCTOS PARA EL CABELLO

Dependen de cómo esté el estado del cabello, debes conocer o te deben indicar cuales usar e, incluso, cuáles no. Qué cantidad, en qué partes del cabello y con qué asiduidad.

El peso molecular (PM) del cabello es de 150 (como una aguja), son los huecos que hay ente una molécula y otra. Su reconstrucción depende mucho de este tamaño.

Las proteínas ideales para él, son las que pesan 300 PM, penetran muy fácil y se absorben muy bien por el pelo. Esto te lo pongo, porque existen tratamientos que tienen proteínas que no son compatibles con PM el cabello, por lo que podrán ser compatibles y efectivos o no según el PM que tengan. Mira las proteínas que usan.

También dependen de varios factores como:

  • Peso molecular: si es de origen vegetal como los que vienen de la soja, maíz y trigo, el PM es de 100.000 y comparte aminoácidos con el cabello de 1 a 3. Si son de origen animal hidrolizado como de los cueros, el PM es de 5.000 a 10.000 y sus aminoácidos compatibles con el cabello es de 1 a 10. Si es de origen colágeno animal como la carne y las pieles, su PM es de 2.000, y sus aminoácidos compatibles con el cabello humano es de 10 a 13. Si su origen es de queratina hidrolizada como el que proviene de los cueros de ganado, plumas, picos de ave y pezuñas, el PM es de 2.000 y los aminoácidos compatibles con el cabello humano es de 12 a 15, y si su origen es de proteína de queratina hidrolizada de cabello humano, proveniente del mismo, su PM es de 150 a 300 y los aminoácidos compatibles con él son de 19 unidades.
  • Potencial de hidrógeno: es el número de cantidad de moléculas de hidrógeno que tienes en tu cuerpo. Se mide del 0 al 14. A menor número, tendrás mayor acidez, a mayor número de moléculas, mayor alcalinidad tendrás, será un número muy cercano al 14. Lo intermedio es el 7, es el grado medio o neutro, el agua destilada lo tiene. Se representa como pH. Depende de este número cogerá los procesos químicos que hagas en tu cabello y también los hidratantes-nutritivos-reconstructores.
  • El pH perfecto en un estado normal, para tener el cabello equilibrado es de 4,5 a 5,5 hasta 6,0, se tiene un pequeño hinchamiento de la fibra capilar. Debemos tenerlo en un pH normal gracias a las glándulas sebáceas y sudoríparas, segregando grasa, agua y sudor, respectivamente, y así provocar un equilibrio lo suficientemente ácido (no más) que hace que se convierta en un cabello sano y estable porque mantiene una estructura de proteínas perfecta.
  • Si lo tienes ácido, más de 6,0, puedes padecer problemas y/o infecciones por microbios, parásitos y agentes que provocan corrosión, como los champús que arrastran y el agua.
  • Los productos más alcalinos son los que tienen las características que más disuelven o limpian el cabello, como el agua oxigenada, el amoníaco, que suele estar en todos los tintes o ciertos ingredientes más fuertes que ésta. Si conoces el pH de tu cabello podrás elegir mejor cada producto y proceso a hacer en él.
  • Al aplicar estos productos alcalinos, el cabello se convierte en alcalino también, el número es más que 7; lo que hace es cambiar la estructura porque lo satura/llena de hidrógeno, tú notarás falta de brillo y suavidad inmediata.
  • Si supera el número 10, lo más posible es que provoque un desequilibrio total en el pelo, rompiéndolo en su zona más sensible, provocar infecciones y lesiones de distinta gravedad. Se necesitarán productos ácidos para equilibrarlo y restar/anular los daños producidos en él.
  • Grados de procesamiento en el cabello: según en el grado que se encuentre tu pelo de procesado o sobreprocesado, se podrá manipular el cabello o no. Hay 6 grados:
  1. Grado primero: es el que tiene menor daño, puede ser provocado por el medio ambiente mismo. Es manejable y se deja hacer cualquier servicio.
  2. Grado segundo: al cabello se le ha aplicado, durante tiempo, productos de fijación que contienen ingredientes dañinos, como las siliconas, con lo que crean problemas en la estructura del cabello, se nota que el cabello está sin luz, sin brillo, opaco. Pero se puede manejar y hacer procesos en el salón, sean químicos o de tratamiento.
  3. Grado tercero: si usas mucho el secador, tenacillas, plancha, el Sol y todo además sin protección térmica, te tocas muchísimo el cabello o haces peinados muy apretados como coletas y trenzas en él, también si se crea un estilo cuando lo tenemos mojado o lo manipulamos con cepillos eléctricos, éste es tu grado. Tienes el cabello deshidratado. Hay que hacer tratamientos de nutrición-hidratación-reparación en él, tanto en casa como en el salón, pero con una asiduidad distinta a las de los siguientes niveles.
  4. Grado cuarto: si te aplicas o aplican un color o te lo destiñen, te hacen mechas, te lo aclaran en malas condiciones o sin saber hacerlo de la manera correcta. Hay que leer las instrucciones y hacerles caso en caso de ponértelo tú en casa. Lo que recomiendo es que te hagas el color en el salón, también con ello harás que no te queden zonas sin colorear/desteñir, o que te quede de distintos tonos. El profesional es el que sí lo conoce con exactitud. Incluso te puede recomendar productos y hábitos que puedes hacer en casa, sin llevarte mucho tiempo y dando muchos beneficios.
  5. Grado quinto: es cuando a tu pelo le han hecho un mal alisado o una mala permanente. Mucho cuidado, puede que no tenga arreglo después del proceso y tengas que cortar todo el cabello donde hallas hecho el proceso, ya que dañas toda la estructura por completo, una porosidad mala y que se aclare el cabello con distintos tonos en esa sola vez, y con eso, ya no hay solución. La permanente es una de las técnicas químicas más fuertes que se puede hacer, tiene que romper los puentes de azufre y los cistinos, por lo que si decides hacerte cualquiera de estas dos técnicas, tienes que hacerlo con un profesional.
  6. Grado sexto: aquí está la decoloración como culpable, ya que se necesita sosa caústica, que es el ingrediente más alcalino existente, tiene un pH de 10 o más y lo que hace es hinchar al máximo la cutícula capilar, romper los enlaces cistinos y hacer que perdamos más del 40% de las proteínas del cabello. Si, encima, se hace mal, se aplica más tiempo del debido, no se mezcla ni reparte bien el producto en cada mechón por igual, lo que hará será romper el cabello desde el tallo, o incluso desde la raíz. Todas las partes débiles del cabello se romperán. Lo perderás. Yo recomiendo ir al salón, usar sólo en la zona que se necesite y la cantidad y tiempo necesarios y en el resto de la melena, aprovechar ese tiempo de efectividad y poner un tratamiento de reconstrucción o fuerza. Una vez lo laves, ambas partes han recibido su parte de proceso. En casa cuida mucho el cabello si le aplicas decoloración, aclarantes o mechas con productos idóneos para ello y usa mascarilla dos veces por semana. A más tiempo mejor. Acuérdate, la toalla de microfibra, no frotar ni al lavar, ni al secar, todo a toques y aplica productos humectantes y protectores térmicos si vas a usar herramientas térmicas. Lo ideal es que no las uses, pero no te ates el cabello mientras esté mojado tampoco.
  7. Grado séptimo: estamos ante una decoloración sobre otra encima; una decoloración sobre un alisamiento, o sobre una permanente, o sobre un alisamiento sobre una decoloración. Aquí el cabello tendrá un daño de un 300% más que cuando se hizo la primera decoloración ya que tenía sus defensas de forma natural (grasa, agua, sudor).

En cabello virgen, no tratado con nada, los alisamientos permanentes están dentro de los sobreprocesamientos porque entran en el número 10 de alcalinidad y rompen más del 60% de las proteínas que contiene el cabello. Si llegara al 80%, hay que cortar toda la melena que ha recibido el proceso, el cabello queda roto por completo. Por suerte, con el tiempo, ya a día de hoy, hay más de 24 alisados distintos y ya no son dañinos todos, como antiguamente que existía sólo el alisado con formol, ahora prohibido.